1 de mayo, día del trabajador, feriado,
locales cerrados, son postales de los pueblos y ciudades en dicha fecha. En
este día, además, se celebra el Día de San José Obrero. La colonia descendiente
de Alemanes del Volga, ubicada entre Villa Mirasol y Colonia Barón en nuestra
provincia, que lleva el nombre del patrono realiza año a año la fiesta y
peregrinación a él. El templo, consagrado como monumento histórico es el lugar
donde cientos de creyentes se acercan a disfrutar de una jornada repleta de fe
y amor.
Este año, a diferencia de otros, la jornada
inició en horas de la mañana; precisamente al mediodía. La intención fue
comenzar a recibir a los fieles desde temprano para compartir el almuerzo en el
pacífico pueblo pampeano. Empanadas criollas, chopripanes, y hasta pata de
ternera se pudo degustar. Obviamente, tortas típicas y pastelitos, acompañados
de café como postre ilustraron la tarde. Previo a la santa misa se visitó la Ermita de la Virgen de Schoenstatt, la
cual se haya a dos cuadras de la parroquia de San José. En el lugar se respira
aire puro, la paz deambula y los árboles de cientos de años decoran la postal
serena de la Ermita.
La santa misa fue precedida por el Obispo
Raúl Martín, acompañado por padres de la zona, junto a la importante presencia
del padre Santiago Herr, quien a la brevedad cumplirá sus 100 años de vida. A
Miles de fieles y peregrinos colmaron el lugar, y vivenciaron la santa
celebración. Momento emotivo se vivió cuando el Padre Julio contó que durante
su estadía en Europa, compartió un desayuno junto a otros padres con el Papa
Francisco I, en el cual al contarle que era de la pampa, el Sumo Pontífice le
preguntó acerca de cómo se encontraba el ‘camino hacia el Santuario de San
José’.
Tras la santa misa, el grupo del danzas alemanas baronense ‘Immer Truff’
brindó un magnífico espectáculo, acompañando de este modo la maravillosa
jornada. Cabe destacar, que los más de 2 mil fieles pudieron adquirir a lo
largo de la jornada objetos de santería y librería religiosa
